GENERAL PICO: La amenazó, la tomó de los pelos, le arrancó un mechón y la zamarreó hasta que la mujer pudo zafarse

La jueza de audiencia de juicio piquense María José Gianinetto condenó a un hombre de 66 años como autor material y penalmente responsable de los delitos de “amenazas simples y simple tenencia de arma de fuego de uso civil sin la debida autorización legal y de uso condicional”, a la pena de dos años de prisión en suspenso.

Además le impuso las siguientes reglas de conducta por el término de dos años: fijar domicilio y no ausentarse del mismo en forma prolongada o modificarlo sin previo aviso al juez de ejecución y al fiscal; prohibición de cualquier acto de intimidación y/o perturbación respecto de la damnificada, su ex pareja.

Se presentó ante el juez un acuerdo de juicio abreviado, firmado  por la fiscal Ivana Hernández, junto al defensor oficial Alejandro Caram, y su defendido. La damnificada, al ser informada sobre la firma del mismo, prestó su conformidad.

Con las pruebas aportadas por las partes, la jueza dio por demostrado que el 19 de marzo de 2018,  el imputado se presentó en el domicilio actual de la damnificada, le manifestó amenazas,  la tomó de los pelos, le arrancó un mechón y la zamarreó hasta que la mujer pudo zafarse. Esa situación generó temor en la víctima,  por lo que decidió realizar la denuncia, sabiendo además que el imputado tenía armas de fuego en su domicilio. También  se le imputó al agresor tener sin la debida autorización legal, en su domicilio armas de fuego que fueron secuestradas en un allanamiento realizado en su vivienda.

La magistrada agregó en el fallo que “con la decisión acordada por las partes se garantiza una respuesta judicial rápida y efectiva, dado que aún en el hipotético caso de finalizarse el proceso de un modo ordinario, en un eventual juicio oral y público -y no con la salida alternativa que aquí se presentó-, la sentencia que recaería (…) sería similar o idéntica a la acordada por las partes. Todas estas cuestiones, sumadas a razones de celeridad y economía procesal para una solución rápida y definitiva de este conflicto, aconsejan el dictado de esta sentencia, para el caso, tal como se ha solicitado por las partes.”

Finalmente, Gianinetto ordenó el decomiso de las armas secuestradas en el allanamiento.