SENADOR DANIEL LOVERA: "Acompañar este proyecto, no es solo reconocer la enorme importancia de todo un sistema, si no poner en valor a todas y cada una de las personas trabajadoras del sistema de salud, tanto público como privado"

Es prioritario para el interés nacional la vida y el resguardo del personal del sistema de salud argentino, siendo esencial la prevención del contagio del virus entre los profesionales del sistema de salud, tanto público como privado, y entre los trabajadores y las trabajadoras voluntarios que presten servicios esenciales durante la emergencia….

El proyecto otorga facultades y obligaciones a la autoridad de aplicación con el sentido de intercoordinar la acción entre las jurisdicciones y otros actores relevantes como universidades y sindicatos, con el fin de establecer protocolos de seguridad, guías de práctica, fijar procedimientos de bioseguridad, garantizar el abastecimiento de insumos y la capacitación de todo el personal que preste servicios en los establecimientos dedicados a la atención, generando un registro único de personal de salud que se haya contagiado con el coronavirus, a fin de hacer un seguimiento de su evolución y analizar cada caso en particular, pero dentro de un mapeo de expansión de la pandemia general.

Si hasta ahora podemos hablar de resultados relativamente positivos en esta lucha contra la pandemia en términos de la baja cantidad de infectados y fallecidos con respecto a otros países; si logramos el aplanamiento de la curva dentro de un continente que se convierte en un nuevo epicentro de esta pandemia, esto se debe al accionar del Gobierno Nacional, al compromiso del pueblo argentino y a la labor incansable de los trabajadores y trabajadoras que brindan diariamente todos sus esfuerzos. Ellas y ellos son quienes se exponen a diario para lograr contener el avance del Coronavirus. Ellas y ellos son quienes cumplen con sus responsabilidades en situaciones de exigencia extrema y permanente, con la gran presión y el inmenso temor de contagiarse en cada paso, poniendo en riesgo su vida y la salud de sus familias, con el único objetivo de proteger al resto de la población.

En tal sentido, es responsabilidad del Estado garantizar que puedan cumplir con su trabajo en las condiciones de mayor seguridad posible.

Debemos tener en cuenta que, además de poner en riesgo la propia vida, el contagio entre el personal de salud pone en peligro al servicio sanitario en su conjunto, debilitando su capacidad general de atención, contención y tratamiento. Por lo tanto, debemos impulsar el reconocimiento que se merece nuestro sistema de salud pública, tantas veces denostado y vapuleado.

“En momentos como los que vivimos nos damos cuenta cuán afortunados somos de contar con prestaciones sanitarias para toda la población, con el Sistema Público, el Privado, el de las Obras Sociales Sindicales, y con la presencia de un Ministerio de Salud Nacional que, si ya en situaciones normales es fundamental, en contextos de emergencia sanitaria como el que nos toca atravesar se vuelve imprescindible”.

Acompañar este proyecto, no es solo reconocer la enorme importancia de todo un sistema, si no poner en valor a todas y cada una de las personas trabajadoras del sistema de salud, tanto público como privado.

El proyecto colabora en cimentar los principios de solidaridad, justicia y equidad, pretendiendo, no más ni menos, que garantizar los derechos de los trabajadores y las trabajadoras.

No tengo dudas de que después de esta pandemia ya no seremos los mismos…. No tengo dudas de que después de la crisis sanitaria por el coronavirus el mundo no será el mismo y que nuestra realidad cambiará para siempre. Esta transformación ya comenzó: estoy convencido de que el trabajo va a ser el eje de esta nueva sociedad, y la ampliación de derechos, el horizonte.

Beneficios especiales al personal de Salud, Fuerzas Armadas, de Seguridad y otros ante la pandemia de la COVID-19

El proyecto en tratamiento es un acto de justicia por sí mismo porque implica proteger y resguardar a quienes, a diario, se exponen para protegernos y resguardarnos a todas y a todos.

Es una reivindicación a la labor silenciosa de quienes están permitiendo que Argentina no sufra la misma situación que impera en otros países hermanos de Latinoamérica.

Se establece que no paguen el Impuesto a las Ganancias, por un período de 7 meses (desde el 01/3 hasta el 30/9), con posibilidad de extenderse por el tiempo que dure la emergencia sanitaria, a todas aquellas remuneraciones que hayan sido generadas a partir del cumplimiento de horas extra, de guardias obligatorias y de otros conceptos, por el desarrollo de las actividades consideradas esenciales por la emergencia sanitaria de la COVID-19.

Según la letra del proyecto, este beneficio será retroactivo para estos conceptos devengados en marzo y abril del corriente año y, por tal motivo, estos trabajadores y estas trabajadoras, en el próximo recibo de sueldo, deberán tener incorporado el reintegro de la retención que se le aplicó sobre los conceptos indicados durante esos meses.

Otro beneficio que genera la presente iniciativa es la pensión graciable para los familiares de trabajadores y trabajadoras que lamentablemente hayan fallecido a raíz de la pandemia.

Esta pensión será equivalente a una suma mensual igual al doble del haber mínimo jubilatorio, y serán beneficiarios de esta pensión graciable: el o la cónyuge, hijos e hijas solteras hasta los 21 años de edad o hasta 25 años, dependiendo si se encuentran restringidos en su capacidad, y las personas a cargo de estos trabajadores y estas trabajadoras.

También alcanza a quienes se encuentren relacionados con la salud y la seguridad, es decir: “profesionales, técnicos, auxiliares (incluidos los de gastronomía, maestranza y limpieza), al personal operativo de los sistemas de salud pública y privada, al personal de las Fuerzas Armadas, a las Fuerzas de Seguridad de la actividad migratoria, de la actividad aduanera, bomberos, recolectores de residuos domiciliarios y recolectores de residuos patológicos que presten servicios relacionados con la emergencia”.

En síntesis, las trabajadoras y los trabajadores de los sectores referidos, quienes se exponen día a día enfrentando la pandemia, están viendo cómo su jornada laboral se incrementa abruptamente. Esta realidad beneficia su salario debido al cobro de los conceptos extraordinarios, pero si el impuesto a las ganancias –tal como está- les termina recortando más su nivel de ingresos y terminarían percibiendo menos que lo percibido sin el aumento de horas.

Es por esto que considero un acto de plena justicia que quienes más expuestos se encuentran ante esta crisis sanitaria, no terminen también exponiéndose a otro escenario en el cual su esfuerzo y dedicación no encuentre la retribución que requiere.

Como cierre, quiero decir que Argentina y el mundo están atravesando una de las peores crisis económicas de la historia. Por eso, estos proyectos son un pequeño aporte a uno de los sectores que está asumiendo los mayores riesgos.

Sabemos que hay muchísimos otros hombres y mujeres que continúan esforzándose, trabajando y arriesgando sus propias vidas y las de sus familias desde el día que la pandemia se desató.

Para ellos, debemos seguir proponiendo iniciativas que le brinden acompañamiento.

Esto es lo que consensuamos y avanzamos hoy, pero entendemos que debemos seguir buscando acuerdos para incluir a otros sectores que están dentro de servicios esenciales y también merecen nuestro reconocimiento, como los empleados y empleadas de comercio, los trabajadores y las trabajadoras de luz y fuerza, entre otros.

Las iniciativas parlamentarias que estamos tratando el día de hoy nos permiten comenzar a vernos de pie frente a esta crisis excepcional, también nos lleva a considerar que a raíz de la situación de emergencia, no solo se debe impulsar la adopción de medidas orientadas a la protección de la salud pública, sino también a coordinar esfuerzos para medir el impacto de las medidas sanitarias sobre los procesos productivos y el empleo, con el fin de garantizar el derecho de toda

persona a tener la digna y merecida retribución por su labor, que le asegure condiciones dignas para ellas y para sus familias.

Vamos a votar favorablemente estas iniciativas. Muchas gracias.